Amor Numérico

Matemáticamente expliqué un tu y yo,
de la incertidumbre decidimos no hablar,
porque tu amor y el mio no entraba en estadísticas,
mas no pudimos predecir un evento final.

A ciencia cierta diré que fueron tus medidas las que me enamoraron,
he muerto por la raíz que significó el apotema de mi llanto,
y al sumarle tus logaritmos emocionales he terminado factorizándote,
llegando a concluir con una respuesta errada.

Infinitas veces quisimos integrar tus cuentos con mis realidades,
sin embargo los problemas continuaban allí,
noches de desvelo intentado descifrar tu ecuación ¿Y para qué?
si la respuesta era simple, pertenecías al grupo del común denominador.

Quise simplificar las cosas, maximizar nuestros buenos momentos,
y eliminar las incógnitas de la memoria, quedé parcialmente derivado,
entre nosotros ya no hubo relación, solo dos constantes y una separación,
dos problemas, uno matemático y otro filosófico.

Pero aprendiste que sin límites el amor no es infinito,
rompiste el teorema para inventar una nueva fórmula,
en la cual se integraron dos vectores en una dimensión,
tan diferentes y tan iguales, ¿La resultante? la soledad.